Estimulación Cognitiva

Estimulación cognitiva

En Integral Centro Terapéutico llevamos a cabo la sesiones de estimulación cognitiva para personas que han sufrido daño cerebral a causa de un accidente cerebro vascular (ictus) o traumatismos craneoencefálicos o que presentan deterioro en las funciones mentales.

La Estimulación Cognitiva o Psicoestimulación es una terapia especializada, está diseñada según los principios de la individualización de la intervención. Frente a otros tipos de actividades (talleres de memoria) que buscan prioritariamente el entretenimiento de las personas, la Estimulación Cognitiva se sustenta en una base científica y teórica y tiene un claro propósito terapéutico donde la programación individualizada se convierte en el eje principal de la planificación.
El primer paso es la evaluación individualizada, dirigida a establecer un diagnóstico neuropsicológico y detectar variables de relevancia para el desarrollo del programa psicoestimulativo.

Dicha evaluación se divide en:

  • Evaluación neuropsicológica: dirigida a conocer los procesos cognitivos preservados, los procesos perdidos, los procesos alterados así como el tipo y grado de alteración de estos últimos. Incluye tests o baterías abreviadas necesarias para el seguimiento posterior y otras pruebas de exploración.
  • Información personal: el nivel académico premórbido, los hábitos e intereses, la existencia de alteraciones de conducta o desajustes psicoafectivos, las habilidades sociales y variables de personalidad.

Esta evaluación permitirá la selección de tareas adaptadas a las características personales de cada cliente, y posteriormente deberá realizarse un seguimiento periódico de la evolución de la persona con el objeto de ir revisando y ajustando las actividades y tareas al grado de deterioro y evolución psicoafectiva.

La Estimulación Cognitiva se dirige a los diferentes niveles del individuo: funcional, cognitivo, psicoafectivo y relacional. El funcionamiento cognitivo en el ser humano no es independiente del resto de niveles, por lo que esta terapia debe incluir y tener en cuenta en su diseño las diferentes dimensiones del ser humano y la interacción continua que se produce entre ellas. Por otro lado, las diferentes funciones cognitivas actúan como sistemas funcionales interrelacionados, entrando en juego distintas combinaciones y organizaciones de los procesos y subsistemas dependiendo de las tareas cognitivas a las que deba responder el sujeto en un momento determinado. De esta manera, una tarea concreta programada en una sesión de psicoestimulación, suele actuar poniendo en marcha distintos sistemas, y llevando a cabo una estimulación más global al trascender a los componentes más específicos de las diferentes funciones cognitivas.